APSE se opune rotundamente al regreso a lecciones presenciales en la modalidad propuesta por el Ministerio de Educación Pública, debido a la inseguridad que representa para la salud pública.
El MEP se ha limitado a presentar protocolos confusos, que son virtualmente imposibles de cumplir a cabalidad en las condiciones actuales, en perjuicio de la salud y bienestar de las personas trabajadoras de la educación, de todo el estudiantado y de sus familias.
Por mencionar un ejemplo, los protocolos de transporte de estudiantes no son claros, y pueden darse muchísimas situaciones de hacinamiento tanto a la entrada como a la salida de clases presenciales.
Es preocupante la sobrecarga de trabajo para el personal docente, al crear hasta cinco escenarios diferentes para dar lecciones. Por si fuera poco, se recortaron en exceso plazas y presupuestos, y no se han hecho las transferencias necesarias a las Juntas de Educación.
No es de recibo que las autoridades del MEP simplemente digan que no es posible la vacunación del personal de educación, sin tener apertura a buscar opciones para una vacunación temprana que permita un regreso a clases seguro de verdad.
Por estas razones, desde APSE estamos realizando intensas capacitaciones para atender las denuncias laborales, legales y sanitarias que afecten a nuestras personas afiliadas y a la población en general. Seremos incansables en conseguir condiciones seguras.
El MEP debe asegurar la viabilidad del curso lectivo, y no dejar a los centros educativos a merced de las y los directores y su criterio personal. No se debe poner sobre cada docente, conserje y estudiante una responsabilidad que le corresponde al Estado.
